miércoles, 9 de febrero de 2011

El mayor desmán financiero de nuestra historia

ANTÓN COSTAS 28/01/2011

Tengo en el cuerpo la incómoda sensación de que estamos a punto de
cometer el mayor desmán financiero de nuestra historia: la entrega de la
mitad, ¡la mitad!, del sistema financiero español, a precios de saldo y
desguace, a bancos, inversores privados y "fondos buitres", como les llama
un conocido y reputado analista financiero, José Carlos Díez, en su blog.
Quizá este malestar es debido a un arrebato de patriotismo. En cualquier
caso, las consecuencias serían muy importantes.

Primero, una concentración desmedida y una disminución significativa de la competencia bancaria, cuyos perjudicados serán familias, profesionales y pequeñas y medianas empresas.

Segundo, la aparición de riesgo de exclusión financiera para personas con baja cultura financiera, que tenían en la proximidad de las oficinas de las cajas un servicio público que los bancos no prestarán.

Tercero, la pérdida de la Obra Social de las cajas, que actúa como un
segundo Estado de bienestar, al atender a situaciones sociales adonde no
llegaban las políticas públicas.

Y, cuarto, la pérdida de un instrumento de dinamización cultural, especialmente en zonas pobres o alejadas. El valor económico que se perdería para la sociedad en su conjunto sería inmenso. Muchísimo mayor que el valor patrimonial o contable, que es lo que ahora está en juego.

Si queremos preservar ese valor económico, la solución no es la fuga hacia
delante, para entregarlas a inversores privados. La solución es la vuelta
atrás, hacia lo que nunca deberían haber dejado de ser.
Las cajas son una institución financiera peculiar. Su mercado geográfico
natural es el local y provincial. Y su función natural el crédito a las familias y pymes. Ese mercado y esa operativa eran coherentes con una específica estructura de propiedad distinta de la de los bancos.
Ha sido una historia de éxito, hasta ahora.

A esta situación se ha llegado a través de un largo camino de despropósitos.
Son muchos los que han colaborado: legisladores, autoridades, reguladores,
supervisores y las propias cajas.

Legisladores, autoridades económicas y monetarias han puesto un empeño
digno de otras causas en liberalizar las cajas para romper sus fronteras
geográficas naturales y dejar que hicieran todo lo que hacían los bancos. No
midieron los riesgos. Esa libertad que se otorgó a los directivos chocaba con
la lentitud de sus órganos de gobierno a la hora de tomar decisiones en
momentos de crisis.

Los directivos aprovecharon esa liberalización para una expansión
irresponsable y para concentrar las inversiones en inmuebles y suelo. Como
los depósitos de los impositores no daban para financiar la expansión
crediticia, se endeudaron hasta las cejas en los mercados europeos de
capital. Riesgo inmobiliario y alto endeudamiento ha sido un cóctel
explosivo.

Lo más sorprendente es ver cómo el supervisor, el Banco de España, dejó
crecer ese riesgo y endeudamiento. Su labor de vigilancia y supervisión ha
sido manifiestamente mejorable. La situación actual cuestiona su labor, al
menos hasta 2007. No vale ahora echarle la culpa a la "politización" de las
cajas. No puede lavarse las manos. Alguna explicación merecen los
españoles y que la autoridad bancaria les diga qué hará en el futuro para
desarrollar mejor su función.

Las autoridades autonómicas y locales han puesto su grano de arena. Al
buscar una solución en los matrimonios endogámicos han empeorado la
situación. La unión de dos contagiados no da lugar a uno sano.
Finalmente, el Gobierno ha estado creyéndose durante demasiado tiempo su
propia mentira: que teníamos el mejor sistema bancario del mundo
mundial. Faltó diagnóstico precoz para ver el contagio y diligencia en la
aplicación de la medicina que tenía a mano: el propio Fondo de Garantía de
las Cajas y el FROB. Ahora todo son prisas y precipitaciones. Y así nos va.
La solución para preservar el valor económico que las cajas tienen para la
sociedad y la economía española es la intervención temporal y la depuración
de responsabilidades. Esa intervención no debería llevar aparejada la
obligación de conversión en bancos. Al contrario, debería forzar a las cajas
intervenidas a dar un paso atrás: volver a recuperar su ámbito de negocio
natural. No es imposible. Así se ha hecho en otros momentos de reforma
bancaria.

¿Cuánto costaría la intervención? La vicepresidenta Elena Salgado ha
estimado que unos 20.000 millones adicionales, incluyendo bancos. En
total, un 3% del PIB. Cantidad manejable, y más productiva que los gastos
faraónicos en el AVE. Y menor del 6% del PIB que costó la intervención del
sector privado bancario en los años ochenta, desde Rumasa hasta Banesto.
En todo caso, ese coste no es nada comparado con el valor económico que se
perdería con la desaparición de las cajas.

Creo que vale la pena salvar las cajas. Si no, el epitafio de los historiadores de nuestro sistema financiero será que "entre todos la mataron, y ella sola se murió".

Posibles fraudes con tarjetas de crédito

(No son casos comprobados ni me han ocurrido a mí. Simplemente me llegaron a través de correo electrónico y, como son factibles, lo pego aquí para que todos andemos más atentos con nuestras tarjetas).

CASO PRIMERO

Un amigo fue al gimnasio y dejó todas sus pertenencias dentro de su casillero. Después del entrenamiento y una ducha, él salió y vio el candado de su casillero abierto y pensó, 'que curioso, yo pensé que lo había cerrado'.

Se vistió y simplemente reviso la cartera para asegurarse que todos estaban en orden. Todo parecía bien, todas las tarjetas estaban en su lugar y no faltaba dinero.

Después de unas semanas, cuando recibió el estado de cuenta de una de sus tarjetas de crédito, venían cargos por ¡2.400 €UROS!

Llamó al teléfono de aclaraciones del banco y empezó a reclamarles que el no había realizado las transacciones. El personal del banco verificó que no había ningún Error en el sistema y le preguntó algunos datos de su tarjeta.

Pero entonces, cuando el revisó su tarjeta comprendió todo: esa no era su tarjeta, en su lugar, encontró una tarjeta de crédito ya expirada del mismo banco.

Un ladrón irrumpió en su casillero en el gimnasio y cambió las tarjetas. El banco emisor de la tarjeta de crédito dijo que al no haber denunciado el robo, no se podía hacer nada, ya que las compras se habían hecho hacía bastante tiempo y él tendría que pagar esa cantidad.

¿Por qué el banco no hizo alguna llamada o verifico al tener esos consumos tan grandes?

Porque se hicieron bastantes compras pero de cantidades pequeñas y eso raramente llama la atención de las compañías o tiendas que reciben las tarjetas y, al sumarse los consumos, resultó esa cantidad.

¡Tuvo que pagar por algo que no recibió!


CASO SEGUNDO

Un hombre en un restaurante pagó por su comida con su tarjeta del crédito.

Le entregaron el recibo y él lo firmó, la camarera dobló el recibo y puso la tarjeta de crédito dentro de él.

Normalmente, él lo tomaría simplemente y lo pondría en su cartera o bolsillo. Sin embargo, echó una mirada sin querer y descubrió que era una tarjeta del mismo banco pero de otra persona, ya expirada.

Llamó a la camarera y parecía nerviosa.

Ella tomó la tarjeta, se disculpó y fue rápido hacia el cajero bajo la mirada atenta del hombre. Todo lo que la camarera hizo al llegar con el cajero, fue entregarle la tarjeta expirada y el cajero, sin ninguna palabra de por medio, la tomó, la dejó bajo el mostrador y le entregó la tarjeta original del cliente.

¡Ningún intercambio de palabras, nada! Ella la tomó y regresó al hombre sólo con una disculpa.

Asegúrese siempre que la tarjeta que pone en su cartera es suya.

Revise, siempre que firme por algo, que la tarjeta que le devuelven es la  suya, aún cuando haya estado lejos de usted por un corto tiempo. Muchas personas apenas reciben la tarjeta de regreso y la guardan asumiendo que es la suya.

¡POR SU PROPIO BIEN, DESARROLLE EL HÁBITO DE VERIFICAR SU TARJETA DE CRÉDITO CADA VEZ QUE LE HA SIDO DEVUELTA DESPUÉS DE UNA TRANSACCIÓN!


CASO TERCERO

Ayer entré en una pizzería para recoger un pedido que había hecho por teléfono. Pagué usando mi tarjeta de débito de Visa, que claro, carga directamente a mi cuenta corriente. El joven detrás del mostrador tomó mi tarjeta, la deslizó por el aparato y la puso bajo el mostrador mientras esperaba la respuesta de aprobación, que es el procedimiento normal.

Mientras tanto, tomó su teléfono celular y comenzó a marcar. Noté que su teléfono era del mismo modelo que el que yo tengo, pero nada parecía fuera de lo normal. Entonces, escuche el 'clic' que se escucha en mi teléfono al tomar una foto.

Él me devolvió entonces mi tarjeta, pero mantuvo el teléfono en su mano y continuó apretando los botones.

Entretanto, yo me quede pensando y preguntándome a que le había sacado una foto.

Discretamente miré bajo el mostrador y no había nada. Me di cuenta que lo único que estuvo en ese lugar fue mi tarjeta de crédito y puse atención a lo que él seguía haciendo.

Puso su teléfono en el mostrador e inmediatamente después, se escuchó el sonido que indica que el mensaje multimedia ha sido enviado.

Ahora lo vi más claro: estoy seguro que este muchacho sacó una foto de mi tarjeta de crédito y se la envió a alguien.

Inmediatamente cancelé esa tarjeta al salir de la pizzería.

Días después, me llamaron del banco para decirme que alguien estaba tratando de hacer transacciones vía Internet con mi cuenta.

¿Que hubiera pasado si yo no tuviera un teléfono igual al suyo? Nunca me habría dado cuenta de lo que hizo.

CONCLUSIÓN

Siempre que usted use sus tarjetas, tome precauciones y no sea descuidado: estas son sólo algunas de las formas de hacer fraude con tarjetas de crédito.

martes, 8 de febrero de 2011

Consejos para evitar estafas por internet

Virus que roban nuestras contraseñas del ordenador, correos falsos con la misma apariencia de nuestro banco (Phishing), ofertas falsas de trabajo, webs de recargas que simulan a las de las compañías telefónicas, páginas de loterias falsas...
La proliferación del uso de internet en algunas de nuestras gestiones básicas
como entrar al banco, buscar trabajo, comprar en tiendas online o incluso
operar en bolsa ha desatado multitud de fórmulas delictivas y de fraude que pueden dar más de un susto a quienes no toman unas medidas de seguridad básicas.
A continuación describimos algunas de las recomendaciones más importantes sobre aspectos sobre los que hay que extremar la vigilancia:

Aprenda a distinguir las webs falsas de bancos y comercios falsas. Muchos
internautas se preguntan como se puede reconocer de forma rápida un página web fraudulenta. En este enlace se explica detalladamente como identificarlas y cómo reconocer las diferencias con la página original.
Escriba directamente las dirección de bancos y entidades. Cuando visite un sitio web relacionado con temas económicos como el banco, la Agencia Tributaria, etc, escriba la dirección (URL) directamente en el navegador web en lugar de hacer clic en el vínculo incluido en un correo electrónico o en un mensaje instantáneo. Los estafadores suelen falsificar estos vínculos para que parezcan convincentes.

Vigile la “S” de los portales seguros. Cuando realice compras u operaciones
bancarias, o visite sitios web que precisen de información confidencial, compruebe que haya una "S" tras las letras "http" (es decir: https://www.subanco.com, en lugar de http://www.subanco.com)/. La "s" significa seguro y debe aparecer siempre que esté en una zona en la que se le soliciten datos confidenciales. Otro de los signos que le indica que está en una conexión segura es el pequeño icono con un candado que aparece en la parte inferior del navegador web (normalmente en la esquina derecha). Preste atención a las políticas de privacidad de los sitios web y del software. Es importante que comprenda de qué modo una organización puede guardar y utilizar su información personal antes de proporcionársela.

Conozca los distintos tipos de fraude y su operativa. El Phishing, Scam Ofertas falsas de trabajo, Phishing-Car, Pharming, Web falsa de recargas, loterias falsas son en muchos casos fraudes desconocidos por los usuarios de internet. Por ello, vamos a describir de forma rápida qué es cada uno y como afectan a nuestra seguridad y datos. La finalidad de estos fraudes es que el usuario caiga en la trampa con cualquier tipo de engaño para que facilitemos nuestras claves, datos privados, etc. Y lo peor es que las mafias que están
detrás de estas estafas son cada vez mas profesionales.

PHISHING
El "phishing" es una modalidad de estafa que consiste en intentar obtener de un usuario sus datos, claves, cuentas bancarias, números de tarjeta de crédito, identidades, etc. para luego ser usados de forma fraudulenta. ¿En que consiste?. Se puede resumir de forma fácil, engañando al posible estafado, "suplantando la imagen de una empresa o entidad publica", de esta manera hacen "creer" a la posible víctima que realmente los datos solicitados
proceden del sitio "Oficial" cuando en realidad no lo es. El phishing puede producirse de varias formas, desde un simple mensaje a su teléfono móvil, una llamada telefónica, una web que simula una entidad, la más usada y conocida por los internautas, la recepción de un correo electrónico.

WEBS FALSAS DE RECARGAS
Es una variante del Phishing que solo busca un propósito, robar datos bancarios a los usuarios. Detrás de llamativas ofertas prometiendo recargas de móviles más económicas se puede esconder una estafa, que lo único que busca es hacerse con información del usuario.
Este tipo de fraude puede ser algunas veces mas peligroso que el tradicional phishing, ya que el ataque no es directo, se encuentra en los anuncios de los enlaces patrocinadores de buscadores de Internet.

OFERTAS FALSA DE TRABAJO (SCAM O PHISING LABORAL)
¿Qué es el SCAM?. El Scam es la captación de personas por medio de correos electrónicos, anuncios en web de trabajo, chats, foros, etc... donde empresas ficticias le ofrecen trabajar cómodamente desde casa y cobrando unos beneficios muy altos. Sin saberlo, la víctima esta blanqueando dinero obtenido por medio del phishing (procedente de estafas bancarias). Siempre le piden que tenga o abra una cuenta bancaria. Su trabajo consiste en recibir transferencias bancarias a su cuenta bancaria, sacar este dinero posteriormente para enviarlo a países extranjeros por medio de empresas tipo Western Union, Money Gram. Las frases para captar a victimas son del estilo de:

¿Esta usted en paro y tiene ganas de trabajar?
¿Quiere obtener un dinero extra?
¿Quiere trabajar cómodamente desde casa?
¿Quiere tener beneficios de forma rápida?.

Suelen mandar un contrato (falso) para hacer mas creíble la oferta. Una vez obtenidos los datos de la victima, y si no colabora, será amenazada.

PHISHING-CAR
¿Qué es el Phishing-Car?. Son ofertas falsas de vehículos. Captan a compradores de coches a un coste muy bajo y la venta nunca se efectúa. Esta persona realiza un pago como señal y al final se queda sin dinero y sin coche. ¿Cómo se produce y en que consiste?. Se llevan a cabo por medio de llamativas ofertas en vehículos lujosos, incluso tienen web trampas con
nombre de dominios muy similares a empresas con mucho prestigio que se dedican a la venta de vehículos de ocasión, pero todas los fraudes tienen algo en común:
El pago se realiza por medio de empresas de envio de dinero a otros países (Tipo Western Union, Money Gram).
El vendedor le oferta la entrega a domicilio.
En un 90% el vehículo que venden esta fuera de su país, de esta manera usted solo puede verlo en fotos.
Le piden primero el 30% o el 40% del precio ofertado como primera señal.
Captan a las victimas por medio de anuncios en web de venta de coches o de segundamano y por supuesto la recepción de correos electrónicos.
Muchas veces el vendedor dice que es un español que vive en Gran Bretaña y por motivos laborales de estancia en el país inglés, tiene que cambiar de forma urgente de coche porque se conduce por la izquierda y su coche al estar matriculado en España el volante está al lado contrario y no se adapta. Por este motivo vende el coche de forma muy económica, te enseñan un coche matriculado en España.

La mayoría de los estafados por esta modalidad enviaron el dinero a Reino Unido, pero esto no quiere decir que no pueda ser otro país.

PHARMING: EL GRAN DESCONOCIDO POR EL USUARIO PERO EL MAS PELIGROSO
¿Qué es el Pharming?. Es una técnica para llevar a cabo estafas online. El pharming consiste en manipular las direcciones DNS que utiliza el usuario, con el objetivo de engañarle y conseguir que las páginas que visite el usuario no sean realmente originales aunque su aspecto sea idéntico. Resumiendo, desvía el tráfico de internet de un sitio web hacia otro sitio de apariencia similar, con la finalidad de engañar a los usuarios para obtener sus nombres y contraseñas de acceso, que se registrarán en la base de datos del un sitio falso que fue creando antes y donde simula a la web que suplantan. Hay gusanos y troyanos que realizan esta función. La victima se entera cuando existe un movimiento extraño de dinero en sus cuentas.

LOTERIAS FALSAS
Falso premio de loterías. El usuario recibe un correo electrónico donde le notifican que tiene un premio de loteria. Si un usuario contesta a este correo, le solicitarán a continuación todos los datos bancarios para un falso ingreso del premio. En otros casos se le solicita un parte del premio que tendrá que enviarlo a un país para poder cobrar el premio completo. En todos los casos el premio es falso. Vigile su ordenador y los programas ocultos. Antes de hacer una compra online o de acceder a un servicio bancario de Internet, asegúrese de que no existe ningún malware activo en el PC. Para ello, complemente su antivirus tradicional con tecnologías proactivas que detecten amenazas sin necesidad de actualizaciones y utilice herramientas antivirus completas. Mantenga siempre actualizado el sistema operativo y las aplicaciones que tenga instaladas en su PC. Las vulnerabilidades del sistema pueden ser una puerta de entrada para el malware e, incluso, permitir a un ciber-delincuente tomar el control de su PC.

Mucho cuidado con el correo electrónico (e-mail). No haga caso nunca a los
mensajes de spam publicitarios ni a aquellos que digan provenir de entidades financieras y soliciten datos confidenciales. Podemos sospechar que un mensaje es fraudulento cuando encontremos errores ortográficos, una gramática mediocre, una redacción extraña, direcciones de sitios web con extensiones poco frecuentes, direcciones de sitios web sólo numéricas cuando debería haber palabras y cualquier otra cosa fuera de lo normal.

Además, los mensajes de phishing le informan que debe actuar con rapidez
para mantener su cuenta abierta o actualizar su seguridad, o lo instan a que proporcione información inmediatamente o algo malo ocurrirá. No muerda el anzuelo. No responda a mensajes de correo electrónico en los que se solicite información personal. Las empresas legítimas no utilizarán mensajes de correo electrónico para pedirle información personal. En caso de duda, póngase en contacto con la empresa por teléfono o escriba la dirección web de la empresa en el navegador web. No haga clic en los vínculos de estos mensajes, ya que podrían conducirle a sitios web malintencionados y fraudulentos. Proteja su dirección de correo electrónico. Al responder a estos mensajes o incluso al descargar imágenes, pasará a formar parte de sus listas y recibirá más mensajes similares en el futuro. También debe tener cuidado cuando haga pública su dirección de correo electrónico en grupos de noticias, blogs o comunidades de Internet.

Investigue sobre la reputación del vendedor antes de comprar en un comercio online. Tampoco pague nunca nada en Internet sin estar totalmente seguro de la honradez del vendedor. Si está pujando por un artículo en una web de subastas, desconfíe de ofertas que puedan llegarle por otro medio que no sea del propio portal de subastas. Podría quedarse sin el producto y sin su dinero.

Nadie da duros a pesetas.. Las ofertas de internet que parecen demasiado buenas para ser ciertas, normalmente NO lo son y no tienen ninguna veracidad. No en vano existe un antiguo dicho popular que dice "nadie da duros a cuatro pesetas", que sigue siendo tan válido como el primer día. El software supuestamente "gratuito", como los protectores de pantallas o los emoticones, las inversiones que le garantizan fortunas incalculables y los concursos que ha ganado sin haber participado en ellos son los anzuelos utilizados por muchas empresas para llamar su atención.

Alertas y revisión de los recibos del banco y de la tarjeta. Las repercusiones del robo de identidad y de los crímenes online se pueden reducir en gran medida si se da cuenta poco después de que le hayan robado los datos o cuando intentan utilizar su información por primera vez. Uno de los mejores métodos para darse cuenta de que algo no está bien es revisar los extractos mensuales que le envían el banco y las empresas de tarjetas de crédito. La mayoría de los bancos y compañías de tarjetas de crédito tienen alertas de notificación de los últimos movimientos, que conviene usar.

Además, es muy conveniente memorizar todas tus contraseñas, nunca guardarlas en el ordenador.

Cerrar todas las sesiones web del navegador tras operar con bancos o financieras.

Eliminar los datos del ordenador cuando se haya terminado de hacer una
transferencia online y prestar especial atención a los archivos temporales, cookies para que no roben información de nuestro ordenador.

viernes, 4 de febrero de 2011

Timo telefónico con tarjetas de crédito

Aquí tienes una nueva versión de fraude con tarjeta de crédito. Es muy
refinada porque son los timadores los que te dan toda la información, a excepción
de la parte que les falta.
Observación: la persona que llama no te pide tu número de tarjeta
puesto que ya lo tiene.
La información que sigue merece leerse atentamente. Al comprender bien
cómo funciona el TIMO de las tarjetas VISA, MASTER CARD ó similares, estarás en
condiciones de protegerte.
El timo funciona del siguiente modo:
La persona (el timador) que llama dice:
'Buenos días mi nombre es (fulano) y llamo del departamento de seguridad de
VISA. Mi número de identidad es el 12460. Su tarjeta nos indica que hay una
compra infrecuente y llamo para comprobarla. Se trata de su tarjeta VISA emitida
por (nombre del banco). ¿Hizo usted una compra de un sistema 'AntiTelecomercialización' (o cualquier cosa que se les ocurra) por un importe de
EUR497.99 de una compañía de Sevilla (u otro sitio cualquiera)?'

Cuando tú respondes que NO, siguen diciendo:
'Bien, vamos a comprobar su cuenta. Vigilamos a esta compañía desde hace
algún tiempo ya que las compras varían entre EUR297 y EUR497, exactamente por
debajo del límite de EUR500 concedido por la mayoría de las tarjetas de crédito.
Antes de su próxima relación de cuenta le enviaremos su crédito a la dirección
siguiente (te dicen TU dirección precisa), ¿es la correcta? '
Respondemos que SÍ.

Sigue diciendo que van a redactar un informe de fraude en tu expediente y que si
tienes alguna otra pregunta que desees hacer debes llamar al número 902-xxx
escrito al dorso de tu tarjeta (902-VISA) que se indica para nuestra Seguridad.
Deberás confirmarles a continuación que el número de tu tarjeta es el
correcto. Te dan un número de 6 cifras.
'¿Quiere usted que le repita el número?'

Ahora viene la parte MÁS IMPORTANTE de este timo.

El timador dice:
'Debo comprobar que usted está realmente en posesión de su tarjeta.'
Te pedirá dar la vuelta a la tarjeta y mirar determinados números.
'Hay 7 números: los 4 primeros forman parte de su número de tarjeta, los 3
siguientes son números de seguridad para comprobar que está en posesión de su
tarjeta. Son los números que usted emplearía al realizar una compra, por ejemplo
por Internet, para que exista seguridad de que usted tiene la tarjeta en la mano.'
El timador te pedirá que le leas los 3 números, y después te dirá:
'Es exacto. Nosotros teníamos que comprobar que no le habían robado la
tarjeta o que no se le había extraviado y que continuaba en su poder ¿Tiene usted
alguna otra pregunta que desee hacer?
Después de que respondemos que NO, nos lo agradece y añade
'No duden en contactarnos si tienen otras preguntas'...y cuelgan.
Los timadores casi no dijeron nada y nunca les diste, ni te han pedido, tu
número de tarjeta.

Después de esta llamada pueden pasar dos cosas:

- Que no hagamos nada y cuando deseemos hacer algún otro pago con la tarjeta
nos la rechace por no haber saldo. Entonces llamaríamos a VISA para preguntar
que ha pasado.

- O, que llamemos a VISA para confirmar la conversación anterior.
Afortunadamente nosotros tenemos en nuestro poder el VERDADERO número
de teléfono del departamento de seguridad de VISA y allí nos informan de que la
llamada que nos han hecho era un TIMO y de que en los últimos minutos se ha
cargado en nuestra cuenta una nueva compra de EUR 497,99.
Resumiendo, nos informan de que hemos sufrido un VERDADERO timo, e
inmediatamente VISA cancela nuestra tarjeta y nos dicen que nos darán una
nueva tarjeta.

El objetivo de los estafadores es obtener tu número de identificación
personal (NIP o PIN en inglés) de 3 cifras, inscrito en el dorso de la
tarjeta.

NUNCA DAR este número por teléfono y decir, al que llame, que tú vas a
llamar directamente a VISA (ó cualquiera que sea tu banco ó caja o similar) para
comprobar éste asunto.

VISA ha indicado que NUNCA piden la información que aparece sobre nuestra
tarjeta porque ellos ya la tienen, lo que es lógico, puesto que son ellos los que te
emitieron la tarjeta.

Cuando damos a los estafadores nuestro NIP/PIN de 3 cifras ellos han
completado la estafa. Después de unos días recibiremos el cargo en nuestra cuenta
y nos enteraremos que hay una compra que nunca hicimos pero será demasiado
tarde o muy difícil presentar denuncia.

POR FAVOR: haz circular esta información

El cambio en el contador de la luz debe ser gratuito

El cambio en el contador de la luz debe ser gratuito


MADRID, 4 (EUROPA PRESS) El cambio en el contador de la luz debe ser gratuito tal y como establece la propia Comisión Nacional de la Energía (CNE), indica la Unión de Consumidores de España (UCE), que advierte además a los consumidores de su derecho a exigir que no se les cobre por este aspecto.

En un comunicado, UCE lanza esta advertencia en respuesta a las consultas de usuarios por una carta de Endesa que les avisa de que deberán pagar nueve euros por derechos de enganche, lo que, según la organización, "no es conforme a la norma".

Por este motivo, la asociación exige a la eléctrica que deje de solicitar este pago y devuelva los cobros efectuados hasta la fecha por ese concepto.
Además, recomienda a los usuarios que hayan abonado el pago por enganche al nuevo contador que reclamen su devolución a la eléctrica y, en caso de no ser atendidos, que denuncien el hecho ante la Dirección General de Consumo, ante la Consejería de Industria de sus respectivas comunidades autónomas y ante la propia CNE.

"A la denuncia deben sumarse todos aquellos que hayan recibido carta de Endesa avisando del cambio de contador de la luz y del consiguiente pago por enganche", añade la asociación.

jueves, 3 de febrero de 2011

Carta del monopolio Endesa a un usuario canario y respuesta de éste

“Estimado señor:
Endesa Distribución va a proceder próximamente a la sustitución de su contador de electricidad por uno nuevo que dispone de capacidad de Telegestión, en cumplimiento de la normativa vigente (RD  1110/2007  1110/2007 de 24 de agosto y Orden TC/3860/2007 de 28 de diciembre). El nuevo sistema de Telegestión permitirá entre otras funciones la lectura a distancia de su consumo.

A lo largo del próximo trimestre, un operario autorizado por Endesa sustituirá el contador que usted tiene actualmente instalado. Si su contador se encuentra en el cuarto de contadores o es accesible desde el exterior de su vivienda, no será necesario que usted esté presente. En caso contrario, el operario se pondrá en contacto con usted para poder realizar el cambio de contador. 
El coste de la sustitución correrá a cargo de Endesa y usted sólo tendrá que abonar una cantidad en concepto de Derechos de Enganche, que según se establece en la legislación actual asciende a 9,04 euros. Por otra parte, el coste mensual de alquiler del contador a aplicar será de 0,81 euros. 
Si necesita cualquier aclaración sobre esta sustitución o desea realizar alguna consulta, puede contactar con nosotros dirigiéndose al Teléfono de Atención de Endesa Distribución Eléctrica  902 509 600  902 509 600 . Estaremos encantados de atenderle. 
Agradeciendo de antemano su colaboración, reciba un cordial saludo”. 
 
II (respuesta)
“Estimados señores de Endesa Distribución:

He recibido su amable carta de fecha indeterminada (porque no la ponen) en la que me comunican una serie de hechos consumados basados, naturalmente, en que ustedes como monopolio hacen siempre lo que les sale de los electrones y a nosotros, como miembros de la honorable manada de borregos forzosamente consumidores, nos queda la única opción gozosa de pagar. 
Les dirijo esta carta porque en el texto que me han enviado, como a otros muchos miles de consumidores, supongo, existen algunas cuestiones que me han sumido en un estado de estupor, catatonia y asombro. O dicho de otra forma, que me han fundido ustedes los plomos. 
Porque vamos a ver. Me dicen ustedes amablemente que van a proceder a cambiarme “mi” contador de electricidad. Una cuestión bastante curiosa porque resulta que en el desglose de la factura que les pago a ustedes todos los meses les abono una cantidad en concepto de alquiler de contador. Y digo yo, ¿cómo es posible que les haya pagado un alquiler por algo que  era mío? ¿Habrán incurrido ustedes, mi querido monopolio, en un involuntario y pequeño error por el que me han estado cobrando indebidamente una modesta pero significativa cantidad a lo largo de los últimos años? 
Sigo adelante con la carta y observo que me cuentan ustedes que el nuevo contador permite la lectura a distancia (es decir, más gente al paro, me temo, maldita tecnología) lo cual, como fácilmente comprenderán, a los usuarios nos la refanfinfla. Dicho de otra manera, que me da igual que lean ustedes el contador a medio metro o desde las quintas chimbambas, a condición de que las lecturas sean las reales. 
Añaden que el coste de la sustitución -en cumplimiento de la normativa legal- correrá a cargo de Endesa. Y digo yo que faltaría más que nos cobraran a nosotros por algo que ni hemos pedido ni maldita la falta que nos hace. O sea, que les agradezco la información aunque me resulte irrelevante. Lo que me llena de asombro es que me indiquen que “solo” tendré que abonar “una cantidad en concepto de derechos de enganche que según la legislación actual asciende a 9,04 euros”. Vamos a ver, querido monopolio, ¿cómo nos van a cobrar a los usuarios un reenganche de un desenganche que ni hemos pedido, ni hemos contratado? Porque digo yo que porque a ustedes les salga del flujo de electrones cambiar los contadores, como les podría dar por cambiar esas divertidas torretas eléctricas de colorines con las que generosamente nos han adornado las autopistas para mejorar nuestra imagen turística, ¿a mi que me cuentan? Eso del derecho de enganche, que debe ser un asunto más complejo que el derecho romano, es un devengo que se produce cuando un usuario se da de alta en la red por primera vez o lo vuelve a hacer después de que le hayan cortado la luz por impago. ¿Pero cómo le pueden cobrar enganche a un consumidor que no se ha desenganchado, que está al corriente de sus pagos y que tiene un contrato vigente con ustedes para el suministro en unas condiciones pactadas?    
Es que si tenemos en cuenta que tienen ustedes, un suponer, 600.000 usuarios en Canarias, a casi diez euros por barba, se van a embolsar así como quien no quiere la cosa unos seis millones de euros, que hay meses que no los gana uno, créanme, aunque sea expresidente de Gobierno y además de llevarse 80.000 del ala al año limpios de polvo (aunque no me consta que de paja) cobren por hacer de lobby para algunas de las grandes empresas españolas. 
Lo que ya me descalabra completamente es que añadan -supongo que intentando convertir la carta en un relato kafkiano- que el coste mensual del alquiler del contador a aplicar (un lapsus sintáctico porque en todo caso querrán decir ustedes ·el costo mensual a aplicar del alquiler del contador...·) será de 0,81 euros. A veeeeerrr. Si el contador es mío ¿me van a pagar ustedes 0,81 euros mensuales? ¿O será que realmente el contador es de quien es -es decir, de ustedes- y amablemente me comunican que me van a cobrar esa módica cantidad mensual?. Y si es de ustedes, ¿por qué principian hablando de “mi” contador? 
Queridos amigos del monopolio. No se líen. El contador es de ustedes. Lo era antes y lo es ahora. Por eso me cobraban antes el alquiler y me lo van a cobrar ahora. Y lo cambian ustedes por imperativo legal, con lo que esa pretensión de cobrarles diez euros a los usuarios me parece sencillamente que es sacar las patas del tiesto y echarle un poco de morro al asunto. Sobre todo porque lo que realmente se callan en su amable carta -en las cartas, como en la vida, es más importante lo que se calla que lo que se cuenta- es que el nuevo contador tecnológicamente avanzado que nos están cascando por decisión unilateral les va a permitir a sus señorías detectar a aquellos usuarios -viviendas, oficinas, bares, restaurantes y otros- que están consumiendo ligeramente por encima de la potencia contratada. O dicho de otra manera, que aquellos consumidores que tienen con ustedes un contrato de potencia de 5 kw y resulta que de media están consumiendo un poco por encima -que como bien saben son un porrón- van a tener que pagarles esa energía extra con un sustancioso recargo y, de propina, estarán obligados a realizar un nuevo contrato de mayor potencia. Es decir, que con esos nuevos contadores van a detectar ustedes los pequeños sobreconsumos que ahora se les escapan, van a cobrarlos con banderillas y van a hacer el negocio redondo aumentando el rango de potencia de los contratos. Ustedes lo saben. Yo lo sé. Los usuarios no lo sabían. 
Resulta descorazonador que mientras hacen ustedes todo esto, la gente que se supone que representa los intereses de los ciudadanos sigan discutiendo del sexo de los galgos y los podencos. Si esto fuera un libre mercado, allá penas porque estarían ejerciendo con toda legitimidad sus derechos como empresa y los usuarios estarían en condiciones de elegir. Como resulta que tienen ustedes el monopolio real de la distribución no estamos hablando de un mercado libre y las reglas del juego deben ser distintas. Desde luego no deberían pasar porque ustedes hagan lo que les salga del forro de los cajones de los electrones y a los usuarios, forzosos, no les quede otra que tragar.
Les agradezco su amable y distorsionada información en torno a sus planes para apretarnos un poco más los bolsillos, les recomiendo encarecidamente que su grupo de producción compre energías renovables de los nuevos parques eólicos del Cabildo de Tenerife (y de paso quesos, vino, yogures, piensos, vacas... o jugarse incluso unas perritas en los casinos de la casa) y les aseguro que como se les ocurra cobrarme diez euros por un reenganche que no he pedido, pienso acudir a la Organización de Consumidores y Usuarios para que no me hagan ni puñetero caso, perder el tiempo, frustrarme y pensar una vez más que estamos indefensos ante los monopolios, los mercados intervenidos y los ineptos que se suponen que tienen que defendernos.
Reciban un cordial saludo.
 
III. (y una objeción desesperada)
PD. El número de información al que me indican en la carta que debo llamar (el  902 509 600  902 509 600 de Atención al Cliente de Endesa Distribución Eléctrica) es un call center -como dicen los modernos- que está en Madrid (me gustaría que creen puestos de trabajo donde yo pago, no sé si me entienden). Te atiende primero un sistema robotizado y luego una amable persona que solo acierta a repetir el manual de la compañía que viene a ser: “Le entendemos, pero le vamos a cobrar. Esto es lo que hay”. Ah. Y el número es de tarificación especial, de pago, con lo cual además de esperar, preguntar y no tener respuesta, también terminamos pagando. Por cierto, por mucho que me he leído las disposiciones legales que citan en su carta -y otras- sobre el cambio en los equipos de medidas básicos, por ninguna parte he visto otra interpretación que la de que son ustedes los que deben instalarlos y pagar el coste de la instalación.